Desde los primeros días de 2019, los cambios naturales bruscos en el territorio de la Federación de Rusia causaron daños significativos a la agricultura doméstica.
Junto con situaciones de emergencia, las anomalías climáticas llevaron a los agricultores rusos a pérdidas, cuyo monto total ascendió a unos siete mil millones de rublos.
Dicha información fue compartida con el público en el servicio de prensa de la Unión Nacional de Aseguradores Agrícolas de la Federación Rusa. El jefe de la organización, Korney Bidzhov, señaló que la cifra anunciada se compiló sobre la base de las evaluaciones de daños que los agricultores proporcionaron al gobierno.
No será superfluo enfatizar que el daño significativo de este año se hizo al complejo agroindustrial de dieciocho regiones rusas. Y diez de ellos incluso introdujeron condiciones de emergencia.
Es de destacar que al menos cuatro mil quinientos millones de rublos es la cantidad de daño causado por el clima a los campos de invierno. En segundo lugar, las pérdidas por brotes de la enfermedad de los animales de granja por fiebre aftosa en los espacios abiertos del Lejano Oriente. Esto es seguido por un alto nivel de humedad del suelo en los campos de Siberia y el Lejano Oriente debido a las fuertes lluvias.
Cabe agregar que la sequía, que atacó inmediatamente a diez regiones rusas y redujo significativamente el rendimiento de los campos agrícolas, aún no se ha tenido en cuenta.