Los empleados de Rospotrebnadzor advierten a los rusos que tienen debilidad por la cocina asiática y, en particular, por las especialidades chinas, y recomiendan que se abstengan de comprar albóndigas y otros productos cárnicos de Sanquan Food.
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Se sabe que el fabricante ya ha retirado productos semielaborados potencialmente peligrosos, y los oficiales de control de calidad de los alimentos eliminan las albóndigas chinas de la facturación mundial y las destruyen.
Cabe señalar que en febrero de este año, se registró un nuevo caso de un brote masivo de PPA en una de las granjas en China. El virus está avanzando a pasos agigantados en Europa y Asia y ya ha llegado a países africanos remotos. En particular, en Zimbabwe a principios de febrero de este año, se registró un brote de infección de cerdos con este virus.